Guo Wengui, el multimillonario chino exiliado que también es socio del infame asesor de la Casa Blanca de Donald Trump, Steve Bannon, enfrenta más problemas legales en su hogar adoptivo en los Estados Unidos. Los fiscales federales arrestaron a Guo (bajo el nombre “Ho Wan Kwok”, uno de los múltiples nombres que ha usado en el pasado) por una supuesta estafa para estafar a sus considerables seguidores en línea por un total de mil millones de dólares.
En un comunicado de prensa emitido por la Oficina del Fiscal de los Estados Unidos anunciando el arresto por 12 cargos de diversos delitos, incluidos fraude electrónico, fraude de valores, fraude bancario y lavado de dinero, se cita al Fiscal de los Estados Unidos Damian Williams sobre el caso:
“Como se alega, Ho Wan Kwok, conocido por muchos como “Miles Guo”, lideró una compleja conspiración para defraudar a miles de sus seguidores en línea por más de mil millones de dólares. Kwok está acusado de llenarse los bolsillos con el dinero que robó, incluida la compra de para él y sus parientes cercanos, una mansión de 50.000 pies cuadrados, un Ferrari de 3,5 millones de dólares e incluso dos colchones de 36.000 dólares, y financiación de un yate de lujo de 37 millones de dólares.
“Como se alega, Kwok mintió a sus víctimas y les prometió retornos enormes si invertían o proporcionaban dinero a GTV, su llamada Himalaya Farm Alliance, G|CLUBS y Himalaya Exchange”.
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Guo y el presunto cómplice Kin Ming Je son acusados por las autoridades de mentir a sus seguidores en línea y utilizar sus “inversiones” para financiar los fastuosos gastos enumerados anteriormente. Otros artículos de lujo mencionados en el comunicado de prensa como adquiridos mediante supuestas ganancias ilícitas incluyen “alfombras chinas y persas por un valor aproximado de 978.000 dólares, un televisor de 62.000 dólares y un soporte para leña para chimenea de 53.000 dólares”, así como un automóvil Bugatti personalizado valorado en 4,4 millones de dólares.
Los fiscales han confiscado un total de 634 millones de dólares en ganancias de la supuesta estafa de Guo, además de un tesoro de activos comprados con aún más dinero de su supuesto fraude de inversiones.
Guo se declaró inocente de todos los cargos y, según se informa, parecía “relajado” e incluso sonrió a la prensa en el tribunal. Según los últimos informes, se encontraba detenido a la espera de que se resolvieran los detalles de su libertad bajo fianza, y su próxima comparecencia ante el tribunal está prevista para principios de abril.